"Porque no fui a la FIL"
Cuando recién conocí a Diana, éramos unas adolescentes. Nuestras diferencias de clase y físicas hablaban,-y siguen hablando- por sí solas. Julio Haro las describió en una canción llamada "La Otra", confieso que la parte que me toca a mí, en algunas estrofas hasta me ofendió en los 80.
Después del típico: ¿Estudias o trabajas? intercalamos uno que otro silencio... luego, intercambiamos títulos de libros, música, películas, hablamos de nuestras convicciones políticas, ídolos etc. Yo procedía de una escuela de número, ella de una privada... sus padres habían invertido un dineral en su edcuación, a mí, gracias al artículo tercero, me había salido de a grapa. Sin embargo, el sentido del humor, el sentido común, el sentido del rítmo y el Imperio de los Sentidos, nos unían. A pesar de que al pasar de los años, las diferencias han abierto una brecha tan abismal, como la que existe entre Slim y la inmensa mayoría de los mexicanos...las coincidencias y similitudes han crecido de manera inversamente proporcional a las diferencias físicas y de lana -cualquier cosa que esto signifique- Desde chavillas hasta la fecha, la narrativa de Nanuch, me ha permitido conocer lugares, personas, probar comidas, estar en restaurantes, escuchar conversaciones, conferencias, inalcanzables para mí. Conocí Mérida y a sus tías mucho antes de hacerlo personalmente. Algún día, quizá, corroboraré lo que me ha platicado de NY, lugar que no quiero morir sin conocer. Gracias a sus crónicas amé, fui amada y el sol acarició mi faz. A Diana le debo mil sensaciones. Mil veces me he apretado la dona para ir a algún lugar, he rechazado las producciones Caterpilar - Pascuarito, cuando muchos darían la vida por el honor de compartir el asentamiento irregular de nuestros amigos los Gómez.
Es verdad, pago porque me alquilen y en cualquier gancho me atoro.La desvelada del Rusty- por sus siglas en inglés-como su nombre lo indica, fue en la madrugada, turno que hasta el día de hay no tengo que trabajar. Les he dicho, que yo como las sirvientas, salgo una vez a la semana. Esa salida la uso muchas veces para Opus. La presentación del Jaibo, se llevó a cabo a una hora que sólo la lana de unos y el desquehacer de otros hizo posible la asistencia. No será ni la primera ni la última ves que yo no esté en el imperativo cultural de esta ciudad...mira dónde viniste a triunfar...Lo bailado y lo bebido en la tarima a go go, ya nadie me lo quita. A Jaibo, Paco y Luis... algún día los escucháré en otro númerito del Rico Mc Pato Padilla.
Meche
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario